Los servicios de bomberos del Reino Unido atendieron en 2024 un incendio relacionado con paneles solares casi cada dos días, según un análisis de QBE. El aumento —un 60% desde 2022— supera ampliamente el ritmo de nuevas instalaciones solares, que crecieron un 29,6% en el mismo periodo.

La aseguradora advierte de que esta divergencia apunta a fallos de instalación o mantenimiento en un contexto de despliegue récord de energía fotovoltaica, impulsado por los objetivos nacionales de descarbonización y por la expansión de paneles en tejados residenciales, comerciales e industriales.

Peligro en las viviendas particulares

Los incidentes se concentran en viviendas particulares, que registraron 97 de los 171 incendios de 2024. Gran parte de los siniestros se originaron en inversores o en los propios paneles, componentes especialmente vulnerables a defectos de montaje, cables deteriorados, sobrecalentamientos o la falta de ventilación adecuada.

QBE alerta también del impacto de la creciente incorporación de baterías de ion-litio en los sistemas solares domésticos y comerciales. Su instalación en espacios de difícil acceso —como desvanes o armarios técnicos— eleva el riesgo y la gravedad potencial de los incendios. En paralelo, los bomberos ya atienden un incendio de batería cada tres días.

La aseguradora pide extremar las precauciones en un momento en que el Reino Unido acelera su plan para alcanzar entre 45 y 47 GW de capacidad solar en 2030. Entre sus recomendaciones destacan el uso de instaladores acreditados, inspecciones y limpiezas periódicas, y la revisión inmediata de los sistemas tras fenómenos meteorológicos extremos, que pueden desplazar paneles, dañar cableados o comprometer la seguridad del inversor.

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